LA HISTORIA DE POR QUÉ EL BLOG PASA A SER DE SUSCRIPCIÓN
Puede que en los últimos días hayas querido entrar a leer algo en el blog y te hayas encontrado con un candado. Con este post quiero explicarte por qué he decidido pasar el blog a un modo de suscripción y que entiendas mejor qué me ha llevado a tomar esta difícil decisión.
Llevaba unas cuantas semanas rebotada, enfadada, pero no hacía nada al respecto. Suelo ser una persona muy tranquila con estos temas y de hecho durante mi etapa en fotografía mi lema era «compartir y no competir», pero la cara dura de algunas personas e instituciones me deja atónita, sorprendida y sí… enfadada. Te cuento un poco más:
Comencé a escribir en mi blog en enero de 2019, al mes siguiente estaba dando de alta mi emprendimiento como psicóloga online. En aquellos primeros compases a penas tenía consultantes, por lo que intentaba centrarme en divulgar, aprender e ir escribiendo sobre temas que percibía como interesantes para mi audiencia. Me fue bien, y en muy poco tiempo conseguí que dos de mis entradas estuvieran en primer lugar de búsqueda de google de forma orgánica lo que se tradujo en más visitas, más gente conociéndome y más consultantes.
Ahora tengo muchas más de esas entradas que son de interés sobre temas que le preocupan a la gente y que google ofrece en primer puesto porque considera que es contenido de calidad y que soy una persona de fiar en esto del blogging. Pero resulta que algunos particulares y un par de medios de comunicación nacionales decidieron un día copiar y pegar en sus blogs o páginas web, algunos de estos post. Todo, con comas y puntos, con expresiones que son muy mías. Sólo un medio de comunicación, tuvo la decencia de nombrarme en su artículo y enlazar lo que escribieron al post original, pero tampoco me preguntaron si quería aparecer ni me pidieron permiso para acribillar mi contenido.
Sé por qué se realizan estas prácticas (parasitar los resultados que da el trabajo de otra persona), no hay que ser muy lista para comprenderlo, pero duelen y no pe parecen ni justas ni éticas. También he de decir que estos medios plagian o se apropian de contenidos porque pueden permitírselo, porque cuesta una pasta proteger legalmente el contenido intelectual a nivel global y porque aunque haya cosas que tengas protegidas, a ver quien es la valiente que se mete en un litigio con el tiempo y recursos que esto conlleva.
Por otro lado sigo teniendo esa vocación de escribir para divulgar, me formo, aprendo y me esfuerzo en documentarme y hacerlo mejor cada día. Por supuesto que, como muchxs otrxs profesionales de la psicología, disfruto facilitando información útil y generalista para fomentar y prevenir la salud mental y me he dado cuenta de que muchos compañerxs están optando por usar plataformas en las que monetizar su contenido. No sé, yo aún no me sentiría cómoda con esa opción, aunque quién sabe, puede que ese sea el destino al final; no descarto nada.
Por otro lado, los formatos de comunicación en redes sociales están cambiando y en el último año parece que al menos yo, no termino de adaptarme. Eso hace que mi alcance, que antaño era algo glorioso, ahora se haya quedado hecho mantillo. Me cuesta llegar a la gente en sitios como Instagram lo que no os podéis imaginar. Pese a que la calidad de mi contenido no haya variado un ápice o incluso haya mejorado, la triste realidad es que me he quedado en una sombra en la que siento que no merece la pena esforzarme si aquello en lo que trabajo no llega al público general, por lo que estoy explorando otras vías más directas como el blog y la newsletter (por cierto, si te das de alta en la newsletter te descargas gratis una de mis audioguías de gestión emocional más populares: la Conciencia Emocional plena).
De momento, para dar valor y significado a mi trabajo y sentir que de alguna forma lo estoy protegiendo he decidido crear una suscripción para mi blog. Durante el primer semestre del año te puedes dar de alta de forma totalmente gratuita, pero a partir del 1 de julio y sólo durante el segundo semestre de este año, para acceder al blog y leer todos los post tendrás que suscribirte pagando una mínima cantidad. El precio (2,99€) es una ridiculez porque aquí la finalidad no es ganar dinero, así que por lo que te cuesta una cerveza en la calle, puedes suscribirte al blog y además de manera vitalicia (para toda la vida). Es un único pago y sin renovaciones, forever. A partir del 1 de enero de 2025 la suscripción pasará a ser anual para los nuevos y nuevas suscriptoras. Es decir, que si me apoyas ahora, tus ventajas serán definitivas y para siempre, sin renovaciones de ningún tipo.
¿Qué va a ser del blog? Pues a día de hoy está más activo que nunca, ya que estoy escribiendo al menos tres post nuevos mensuales y del futuro ya hablaremos. Tal vez me vaya a una plataforma, tal vez deje de escribir, tal vez me vaya bien y pueda conservar intactas estas ganas de compartir, pero lo que es seguro es que ahora estaré menos enfadada, por que con esta pequeña acción siento que estoy defendiéndome y luchando por mi misma. Espero que me ayudes y decidas apoyar mi contenido.
Por lo demás, me encantaría que este fuera un lugar con vida, que se recojan por aquí tus comentarios y recomendaciones y que si quieres que investigue y desmenuce un tema complicado, tengas total confianza para solicitarlo y pedírmelo .
Puedes hacerlo aquí mismo bajo estas líneas o enviándome un email a bcourel@cop.es.
Como siempre, muchísimas gracias por tu tiempo y apoyo. Este post ha sido cortito pero era importante escribirlo. Me gusta que sepas el por qué hago ciertas cosas y que comprendas un poco mejor lo que hay detrás de algunas decisiones que son, como puedes ver, la mar de difíciles.