¿Qué es el trauma psicológico?

Tomando como referencia a Pierre Janet, podemos definir el trauma como el resultado obtenido de la exposición a un acontecimiento estresante inevitable que sobrepasa los mecanismos de afrontamiento de la persona. Trauma es una palabra que procede del griego y significa herida, por lo que podemos entender el trauma psicológico como cualquier acontecimiento que hiere nuestro sentido de la seguridad y del bienestar, y que nos llena de creencias destructivas sobre nosotros mismos y/o sobre el mundo (Aznárez, 2012).

El denominador común del trauma psicológico es un sentimiento de inmenso miedo, de indefensión, de pérdida de control y de amenaza . Podemos decir, por tanto, que los acontecimientos traumáticos destrozan los sistemas de protección normales que dan a las personas una sensación de seguridad, control, conexión y significado.

 

Algunas características del trauma psicológico (mitos y verdades).

  1. ES UNA REACCIÓN EMOCIONAL QUE RESULTA DE UNA EXPERIENCIA NEGATIVA E IMPACTANTE.

  2. PUEDE SER REPENTINO: CAUSADO EN ACCIDENTES, DESASTRES O EVENTOS MUY AVERSIVOS PARA LA PERSONA.

  3. PUEDE SURGIR POR NEGLIGENCIA EMOCIONAL O ABUSOS PROLONGADOS A LO LARGO DEL TIEMPO.

  4. ALGUNOS SÍNTOMAS PUEDEN SER SHOCK, NEGACIÓN, FLASHBACKS, DESEQUILIBRIO EMOCIONAL, ANSIEDAD Y CULPA.

  5. ALGUNAS PERSONAS PUEDEN DESARROLLAR UN TRASTORNO DE ESTRÉS POSTRAUMÁTICO.

  6. DIFERENTES TIPOS DE TRAUMA IMPLICAN DIFERENTES MEDIOS DE GESTIÓN Y SUPERACIÓN.

  7. LOS ADULTOS TENEMOS GRAN RESPONSABILIDAD SOBRE LOS MENORES A NUESTRO CARGO EN ESTE ASUNTO.

  8. LAS TERAPIAS DE 3ª GENERACIÓN PONEN EN CONTACTO A LA PERSONA CON SU HERIDA PARA SANARLA.

 

Nadie sabe cómo o cuándo podría lastimarse psiquicamente y un mismo acontecimiento podría ser totalmente inocuo para una persona mientras que para otra ser la génesis de un profundo trauma. Es por ello que se apunta a que algunas características de nuestra personalidad van a ser fundamentales a la hora de gestionar el trauma. En concreto se han encontrado dos variables predictoras:

  1. Por un lado nuestra capacidad de adaptación al estrés y por otro

  2. Si somos contamos con flexibilidad psicológica o somos personas rígidas.

Precisamente este concepto tan importante, el de la flexibilidad psicológica, lo desarrollaré más a fondo en la siguiente entrada del blog.

 

Algunos mitos y verdades sobre los traumas psicológicos

 
 

¿Cómo solemos comportarnos la personas cuando algo nos genera una herida emocional o trauma psicológico?

VERSUS.jpg

Absolutamente todos reaccionamos ante el malestar. Lo ideal sería poder dar una respuesta, es decir, elaborar lo que nos está ocurriendo, movilizar nuestros recursos y afrontar. Pero claro, ojalá fuera tan fácil decirlo como hacerlo. Lo primero porque somos organismos biológicos dotados con mecanismos de respuesta emocional que no podemos controlar.
Las emociones surgen para ayudarnos a interpretar lo que está pasando, pero lo hacen de manera totalmente automática. Nadie puede decidir cuando tendrá miedo, se sorprenderá o se enamorará de alguien. Las emociones suceden sin más y este es el primer obstáculo que muchas personas se encuentran.
No querer experimentar las emociones o experimentar sólo las que nos resultan agradables es un problema adicional al trauma que actúa como amplificador del daño y el dolor que sentimos. Cuando no sabemos qué hacer con las emociones es necesario ponerse manos a la obra y aprender qué son, para qué sirven y cómo podemos surfearlas.

Es por ello que, en lugar de emplear técnicas de afrontamiento funcionales, que nos ayuden a hacer una buena gestión del sufrimiento que algunos hechos y vivencias nos generan hacemos justo lo contrario: usar técnicas de afrontamiento disfuncionales, que alivian el malestar a corto plazo pero en el largo lo perpetúan y magnifican.
Todxs hemos usado algunas, varias o un amplio surtido de estas técnicas alguna vez en la vida y el que esté libre de “culpa” que tire la primera piedra. En la imagen puedes ver cuáles son.

 

¿Qué podemos hacer para gestionar un trauma?

Justo al lado también podrás observar que existen otras opciones, otras estrategias que puedes poner en marcha para lidiar con el sufrimiento que producen las experiencias adversas de la vida como por ejemplo ir a terapia, cuidar de ti misma/o incrementando el número de actividades que proporcionan placer, clarificando qué es lo importante en tu vida y dirigirte a ello, hablar de lo que te ocurre con tus seres queridos, personas a las que les importan y que velan por tu bienestar. En fin, todo tipo de acciones que te hagan sentir que eres responsable de ti misma/o y que estás cuidando de ti.

En terapia y con la ayuda de un/a psicólogo/a se trabaja en este sentido y por norma general se aborda el problema de la siguiente manera:

  1. Se identifica y se describe el suceso traumático. Se habla de cómo sucedió y qué significó para la persona así de cómo le hace sentir a todos los niveles.

  2. Se realizan sesiones de didáctica y gestión emocional para saber identificar las emociones, qué información valiosa nos aportan y cómo podemos responder ante ellas.

  3. De manera casi simultánea se realiza un entrenamiento en respiración y relajación, para que tengas una primera técnica de afrontamiento funciona que utilizar cuando aún no conoces otras más elaboradas.

  4. Igualmente se hace un entrenamiento en defusión cognitiva, para que aprendas a relacionarte con lo que piensas y sientes desde una perspectiva que no te mantenga atrapada ni perpetúe el sufrimiento.

  5. Se evalúa qué otras áreas pueden estar implicadas y se entrenan las habilidades correspondientes, como por ejemplo habilidades sociales, solución de problemas o asertividad, por poner unos ejemplos.

 
TRAUMA-FRASE.jpg

Comenzar o no a hacer terapia es una decisión muy personal y que debes valorar bien. Supone un esfuerzo personal y económico que tienes que estar dispuesta, preparado para afrontar, pero también es una garantía de que puedes hacer algo positivo, sano y funcionla para cambiar cómo te sientes en relación a algunos acontecimientos o aspectos de tu vida.
Si quieres reservar una sesión para probar cómo es, contarme lo que te ocurre y ver que plan de intervención sería el idóneo para ti, solo tienes que rellenar el formulario que te dejo más abajo. No te dejes para el final y empieza a cambiar cómo te sientes cambiando las cosas que haces.

 

¿Necesitas Ayuda?

 
Anterior
Anterior

Personas manipuladoras

Siguiente
Siguiente

¿Por qué se normalizan algunos problemas de salud femenina?